Introducción


“El Viaje De Una Vida” es un proyecto aplicado que se inscribe en la línea de investigación: lenguajes audiovisuales, creación artística y cultura social;
 líneas contenidas en una serie de opciones establecidas en el Master de Artes Visuales y Multimedia de la Universidad Politécnica de Valencia.
En el campo artístico el proyecto entra en el contexto de las instalaciones audiovisuales con circuito cerrado de video.

Como tipología de proyecto aplicado, “El Viaje De Una Vida” lleva como núcleo de la investigación una producción física y audiovisual. De forma complementaria se plantea una investigación teórica que sirve de soporte y a la vez de guía al planteamiento practico de la instalación, que describe los conceptos y las teorías fundamentales necesarias para poder contextualizar la obra y que han influido en su realización.
Por otro lado el proyecto se apoya también en una parte de investigación y experimentación practica y técnica necesaria para poder construir físicamente la obra, y en una serie de ensayos realizados a partir de técnicas aprendidas durante el curso.

La instalación surge de la idea y de la necesitad de materializar las sensaciones vividas en primera persona que reflejan el viaje que me lleva de mi vida actual a mi hogar de siempre, planteando la construcción de un discurso narrativo a partir de las nociones de viaje y lugar/hogar.
Mas en concreto lo que este proyecto se plantea es relacionar aquellos lugares transitados durante el viaje de vuelta a casa (repetido una y otra vez) con el concepto mismo de hogar.
De esta forma entonces se centra la atención en los aspectos mas íntimos de la vida social actual, los mas personales; aspectos que están estrictamente relacionados con el mundo de los espacios de transito (en el caso especifico las líneas de transporte)  y con el cambio de escala de nuestras percepciones con la realidad debido a la presencia en nuestra sociedad de un espacio y un tiempo real.
Lo que se plantea es materializar espacios vividos de paso, sin ninguna aparente importancia, convirtiendo no-lugares en lugares bien definidos y anclados al recuerdo de hogar.

Cualquiera de nosotros tiene algún lugar que llama casa, el hogar de toda la vida. Físicamente o mentalmente quien más quien menos piensa en ese lugar cuando quiere seguridad, cuando solo quiere lo que conoce y sabe manejar, lo suyo. Lo que pasa con ese lugar es que no sólo se define por sus cualidades físicas, es decir, a veces sentimos estar en casa incluso cuando ese lugar está lejos.
Las personas que viven fuera de su hogar tienden a construirse otro parecido, un lugar que tenga algo que ver con lo que su hogar representa, y pueda reconocerlo como suyo. Y a veces esa maqueta tiende a parecerse más de lo que se querría al propio hogar.
Otras veces, las circunstancias hacen que el lugar en donde vives se modele a tus necesidades, día tras día se transforma, hasta llegar a ser lo que tienes aquí y ahora, tu casa. En este proyecto, lo que se manifiesta como representación del hogar es el espacio, o distancia, que está entre mi lugar de ahora y mi hogar de siempre: es el viaje de uno a otro. Otras veces lo que se percibe como espacio familiar es el viaje entre esas dos situaciones, o vidas. Y así viajar de un sitio a otro y moverse entre dos vidas, crea la sensación de quedarse un tiempo en una tercera, que quizás por las casi doce horas que el viaje dura o quizás porque en la ruta no se aprecia más diferencia que las personas que se cruzan, se define en el propio viaje una vida repetida una y más veces, bucle que llega a conformar un mundo reconocible como familiar.
El objetivo del “Viaje De Una Vida”, entonces, es analizar y describir este mundo, definido por sus rutas fijas dentro de lo indefinido que es la transitividad, y materializar estas sensaciones: las escenografías transitorias de la memoria.
Se plantea así construir una narración que contemple lo físico y lo audiovisual,  y que describa la importancia que pueden llevar a tener aquellos espacios llamados no-lugares, definiendo sus utilidades y las sensaciones que suscitan cuando se les ve con otro punto de vista que no sea ni urbanístico ni antropológico.
Dando una visión personal de la definición de estos espacios la instalación propone elevar o por lo meno enseñar otra cara de los famosos “no-lugares”, que se suelen definir casi siempre por sus simples características practicas y tecnológicas y que están destinados, según una parte importante de sus estudios, a la indiferenciación y anulación de los individuos que “flotan” en ellos.


PLANTEAMIENTO DEL PROYECTO
“El Viaje De Una Vida” es la construcción física-audiovisual de una “escultura móvil” recorrida por una cámara en circuido cerrado: una maqueta física, circular, y móvil que recrea las visiones de los espacios del viaje[1] recorrida desde el ojo fijo de una cámara, que proyecta en tiempo real lo que está viendo.
A esta visión particular le acompaña aquella del viaje real vivido: un video surgido de la grabación de las 12 horas de viaje, como siempre desde el ojo fijo de una cámara, colocada esta vez a mi pecho durante todo el camino.
La visión de dos “documentales”, dos puntos de vistas que engloban en un solo mundo lo grande y lo pequeño, lo real y lo imaginado, lo vivido y lo sentido, lo transitorio y lo estático/estable.
Para que, en fin, la instalación sea capaz de contestar a la pregunta que la misma se pone junto a la investigación y a la experiencia que la acompaña: ¿es posible vivir los espacios de transito como representaciones de la experiencia?
¿Se puede, entonces, llegar a definirlos por sus características de indefinición y ver en ellos proyecciones del hogar y de la memoria?
¿Podemos vivirlos como escenografías transitorias de la memoria?
Preguntas que el desarrollo de este proyecto intenta contestar, como siempre, desde un determinado punto de vista: fijo y móvil a la vez, a enfocar lo general y lo particular, lo real y sus proyecciones.

“El Viaje De Una Vida” es, entonces, el punto de partida (o de llegada) de un proceso relativo a la experiencia personal, es un recorrido que trata de contar un recorrido, la idea y la necesitad de una investigación causada por cuestiones relativas a la vida real vivida y recorrida durante la época actual del “tiempo real”.
La pregunta esencial que se plantea esta investigación quizás no forme parte de la experiencia de todo el mundo, pero si que se plantea desarrollar y gestionar cuestiones relativas a la forma de vivir en la sociedad contemporánea; sociedad jerarquizada y basada en algunos elementos que se han visto generadores de nuevas tipologías de vida, e incluso nuevas realidades.
Conceptos replanteados y readaptados a nuestra época como aquel de “movilidad” (y obviamente todo aquel mundo que esto modifica) que hoy en día lleva a constituir algo parecido al “derecho de los derechos”[2],  o cambio de escala, pueden así llegar a formar las fundamentas para contextualizar la propuesta de esta instalación.
A igual manera se han revisado cuestiones y conceptos relativos a las conformaciones actuales de las ciudades, a la creación de lugares con nuevas características, a la “globalización” de los espacios y del mundo en general, a la posibilidad de manejar el tiempo convirtiéndolo en una abstracción instantánea.
Todo esto para entender unas de las motivaciones (las mas importantes en este contexto) por las que hoy en día se lleva un determinado estilo de vida, y sobre todo para describir lo que esto ha causado: un cambio de escala global a la hora de relacionarse con la realidad.

(ESTRUCTURA del trabajo-dentro del planteamiento)
Para definir lo que ha influido en el desarrollo de la pieza, así como para llegar a contestar a las preguntas formuladas, se ha estructurado el marco conceptual como si fuera un recorrido.
La contextualización de ese proyecto, entonces, abarca una serie de conceptos y teorías mas o menos contemporáneas que se mueven alrededor de uno en particular: el concepto de movilidad.
Este es el punto fijo de la ruta de este viaje, aunque en realidad es él que mueve todos los hilos.

En el primer apartado del marco conceptual se empieza definiendo las características actuales de la nueva movilidad, enfocando el discurso en lo importante que representa hoy en día la capacidad de moverse para vivir en nuestra sociedad; describiendo entonces como el nuevo concepto de movilidad ha cambiado las conformaciones de las ciudades y de las formas de vida.
El trabajo del antropólogo francés Marc Augé se presenta aquí ﷽﷽﷽﷽﷽﷽﷽﷽ases
puedeesentante de las teorias  contexto, y tambien vida capacidad de moverse para vivir en nuestra sociedada como unas de las bases así como en los siguientes apartados; no tanto como representante de las teorías de referencia de este proyecto sino como choque producido con otros pensadores, urbanistas, arquitectos y filósofos que contrastan otras visiones de los efectos producidos por la modernidad, y como base desde la cual desarrollar las conclusiones de este proyecto.

En el segundo apartado se pasa a describir los mayores efectos que la nueva forma de vivir ha causado en las conformaciones físicas de las ciudades:
como estas se han ido transformando en nuevos lugares híbridos, la importancia de la presencia de “no-lugares” en los espacios urbanos, las visiones de urbanistas como Paul Virilio y François Ascher en contraposición a la definición de estos lugares por parte de Augé, la “Ciburbia” de Sorkin y la “Metapolis” de Ascher.
En fin, se desglosa el fenómeno de la urbanización del mundo y del vacío para llegar al efecto principal que todo esto ha causado: un cambio de escala en nuestra percepción con la realidad.

En el siguiente apartado se habla entonces del Espacio y del Tiempo, de cómo se ha encogido el mundo, de cómo según las palabras de Virilio gracias a las nuevas TIC (tecnologías de información y comunicación) se ha pasado de lo Global al Glocal, de una visión global a una visión local del mundo.
Como todo esto ha provocado una perdida de orientación en la percepción con lo real, relacionando todo esto con la conformación física de la instalación: la miniatura del viaje entre dos vidas como compresión de tiempo y espacio.

Si por un lado esta parte de la instalación se refiere al cambio de escala del mundo, lo que en ella se representa, el contenido de la miniatura es mas bien una proyección del hogar.
El paso siguiente es entonces describir como la casa es la manera en la que habitamos el espacio vital; tomando esta vez como guía el solito Augé y el filosofo francés Bachelard se conectan espacio y memoria. La posibilidad de poseer de lejos (o por lo menos la ilusión) que nos da la modernidad pretende terminar con toda distancia física y temporal, de manera que el espacio físico del hogar pueda proyectarse ya no solo como recuerdos, sino como ilusiones del presente.
Hablando así de la memoria en relación con el espacio del hogar, entran en juego las figuras del olvido, necesarias para introducir lo que es la ultima parte: el viaje como proyección de la memoria.

En este ultimo apartado, que sigue muy de cerca el anterior (quizás irán juntos) y que precede las conclusiones, las figuras del Recomienzo y del Retorno de las que habla Augé sirven de guía para hacer una distinción clara entre el viajero y el turista, dos figuras parecidas y a la vez muy distintas. Asociando por un lado el turismo a la modernidad y a las nuevas formas de vida, se distingue por otro tanto el viaje enfocado al descubrimiento de uno mismo (a la manera de los viajeros literarios del siglo XIX, o del artista español Mateo Maté), como aquel viaje repetido una y otra vez, el viaje “asiduo” (el mío).

De esta forma se pretende llegar a representar “El Viaje De Una Vida” como una proyección de la memoria, y a la vez del hogar; un viaje en donde los diferentes puntos de su ruta representan situaciones familiares, cómodas, que no recuerdan el hogar por las cualidades físicas o espaciales, sino por todo aquel conjunto de sensaciones y situaciones que los caracterizan cada vez que se cruzan y se viven.
Se pretende llegar a la conclusión por la que se afirma que los espacios de transito, que forman parte de aquel conjunto de nuevos lugares de nuestra época, puedan ser vividos como lugares de la experiencia y que sirvan no solo a contener de paso los individuos que flotan en ellos.


[1] que alude a visiones simbólicas que recrean mas las sensaciones que las cualidades físicas y estéticas.
[2] Ascher, François. “Ciudad con velocidad y movilidad múltiples”. ARQ (Santiago), Jul 2005, no.60.